Periodismo LGTBI+

El domingo 29 de marzo se estrenó el primer capítulo de Veneno (Atresplayer Premium). Sí, solo el primer capítulo. Y es extraño en tiempos de consumo compulsivo de series (encerrados todxs en casa) tener que ver una serie capítulo por capítulo, esperando día tras día, semana tras semana la publicación del siguiente episodio. Pero la verdad es que no está hecho a posta, el rodaje se suspendió por la crisis sanitaria de la covid-19. Así que nos dan una cucharadita de veneno pero nos dejan con la intriga de no saber cuándo vamos a poder terminar de degustarla del todo. Ese primer episodio piloto tenía que ser impactante para que la gente meses después de haberlo visto decida seguir viendo la serie, y creo que Los Javis (Javier Calvo y Javier Ambrossi) con su ya tan característica huella han dado en el clavo. Esperad un momento. Qué más da lo que yo crea.

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Eiden es un chico trans de 19 años que hace justo un año que decidió dar el paso y empezar a hormonarse. “Llevo sabiendo que soy trans desde que nací”- nos comenta en una entrevista para El Armario Queer después de haber visionado el primer episodio- pero que “al no tener referentes no sabía que me pasaba”. Y por eso, Cristina Ortiz (La Veneno) fue determinante en la vida de mucha gente para mostrar una realidad que muchos desconocían: la prostitución y el cambio de sexo que deciden hacer muchos hombres y mujeres para vivir la vida que quieren.

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Los creadores de la serie cogen la perspectiva de un chico que empieza a cuestionarse quién es y si su icono trans (La Veneno) es en realidad el reflejo de una vida que anhela. A Eiden el primer capítulo le recordó esas “primeras dudas” que le hacían cuestionar qué le estaba sucediendo, y es que el protagonista de la serie hay un momento que le pregunta a su mejor amiga “¿qué ves cuando me miras?”. Unas dudas que a Eiden le costó exteriorizar sin unos referentes claros. La Veneno no era una teórica de la corriente feminista o transexual y creo que tampoco hizo activismo constante de su condición. Hizo algo aún mejor y es ser tal y como era ella, que para mucha gente era algo asombroso. Cuando La Veneno empezó a colarse en los comedores de las familias españolas con el mítico programa “Esta noche cruzamos el Mississippi”, Eiden aún no existía y dice que “ojalá la hubiera conocido en su mejor época”  y que su figura fue importante porque “agradó al público al ser una persona tan deslenguada” y eso hacía que los trans tuvieran “la atención que necesitábamos”.

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La cultura suelen decir que es un reflejo de nuestra sociedad. Pero a veces se nos escapa que no todo el mundo tiene acceso a la creación artística y muchas veces son los mismos los que ocupan los espacios de poder (en este caso de la creación cultural). Que Los Javis decidan crear una serie sobre el colectivo trans es relevante no solo para el colectivo, sino para la sociedad patriarcal en la que vivimos.  Para Eiden, que la mayoría de las actrices de la serie sean trans es “una elección acertada, si se quiere dar realismo a las experiencias” que padecen los personajes. Una de las actrices es Jedet, influencer y cantante, que “ha sido la Veneno de mi generación”, según Eiden y que interpreta a Cristina Ortiz en una de sus etapas. “Tenemos una sociedad con mente más abierta – aunque aún queda recorrido” afirma Eiden que apuesta para “hacer llegar a las personas la existencia de este colectivo para tirar abajo los tabúes y la transfobia”.

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“Si Cristina (La Veneno) no hubiera aparecido en televisión, quizás ellas (las trans y prostitutas) hubieran permanecido en la sombra. De lo que no se habla, no existe. Y lo que no existe, se margina”, es una de las reflexiones que aporta el primer capítulo y la reflexión que marca la importancia que esa mujer acabara copando espacios televisivos cada noche. La trama gira entorno a la teoría de la espiral del silencio de Elisabeth Noelle-Neumann sobre la responsabilidad que tienen los medios de comunicación para determinar eso que acepta la mayoría social. “Porque pueden (los medios) transformar los prejuicios en empatía, la oscuridad en luz y hacer visible lo invisible”, se escucha al final del episodio. Y eso es: hacer visible lo invisible.